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Desaguadero, frontera entre Perú y Bolivia, ha sido recientemente lugar de encuentro entre especialistas de tres programas de cooperación de la UE y los profesionales que trabajan en el CEBAF: el Centro Binacional de Atención en Frontera.  Un total de 25 personas se han reunido durante una semana para intercambiar conocimiento y así mejorar los procesos de cooperación internacionales contra el crimen organizado, principalmente entre policías, fiscales y agentes migratorios. Desde 2008, la UE apoya la lucha contra los delitos transfronterizos a través de diversos instrumentos, entre ellos los programas bilaterales de Bolivia y Perú, con una aportación presupuestaria que supera los 110 millones de euros. 

Al igual que sucede en otros cruces fronterizos de América Latina, Desaguadero presenta un acceso complicado, con puntos particularmente vulnerables utilizados por las mafias y grupos criminales para alcanzar sus objetivos. Ante estas problemáticas, Perú y Bolivia han actuado demostrando un alto nivel de relación bilateral, en particular en lo relativo a la lucha contra el tráfico ilícito de drogas y armas, minería ilegal, extracción ilegal de madera, trata de personas y tráfico ilícito de migrantes, tráfico ilícito de flora y fauna silvestre y delitos informáticos. 

Para profundizar en las funciones llevadas a cabo en centros de coordinación binacional, en los retos pendientes y en el rol que ocupan los programas de la UE respecto a los mismos, hemos conversado con tres expertos que participaron en la actividad de intercambio organizada por EUROFRONT en conjunto con dos proyectos bilaterales de la UE, entre los días 3 y 7 de octubre de 2022: 

• Juan Manuel del Valle, Inspector Jefe la Policía Nacional española y experto del Programa EUROFRONT en material de detección de documentos falsos. 
• Gilles Sabatier, Comisario Divisionario de la Policía Nacional francesa y experto del “Proyecto bilateral para el apoyo de la UE en la lucha contra las drogas y el crimen organizado en Perú”. 
• Joaquín López Gallego, Fiscal y especialista en materia de lucha contra la trata de personas para el “Proyecto bilateral para apoyo de la UE en la lucha contra el tráfico de drogas en Bolivia (fase puente 2021- 2023)”. 

Hasta el viernes 14 de octubre, la actividad tendrá continuidad en Bermejo, ciudad de Bolivia fronteriza con Argentina, para profundizar en los contenidos prácticos de la actividad, particularmente en lo referente a detección de documentos falsos, sustracción de vehículos, lucha contra el tráfico de drogas y la trata de personas. 

La función del CEBAF ante los delitos conexos que implican varias fronteras

Juan Manuel del Valle, experto del programa EUROFRONT, explica de manera muy gráfica la naturaleza del crimen transfronterizo y su complejidad para los profesionales que velan por la seguridad y los derechos humanos: “una persona es captada en su pueblo (pequeña localidad de Bolivia), y tras ser tratada es enviada a Europa, en concreto a un club de alterne de España, para la que ha tenido que viajar por diferentes países hasta llegar a su destino final, para ello la organización le ha facilitado documentación falsa. En su viaje pasó por el puesto fronterizo de Desaguadero, hasta llegar a Lima, en donde fue forzada a coger el avión. Es en ese puesto CEBAF de Perú-Bolivia donde se debería inspeccionar esa documentación y comprobar que es falsa, detectar la trata y proceder”. 

En definitiva, “En definitiva, la falsedad documental está conectada con otros delitos como la trata de personas o el cruce ilegal de fronteras, entre otros. Una cooperación policial de todos los implicados y una buena formación – advierte Del Valle - hacen posible la detección y persecución de los delitos transfronterizos”.

En esta cadena de cooperación contra el crimen, nos explica Gilles Sabatier, “la función del CEBAF consiste en agilizar, bajo un sistema de control integrado, la circulación de aproximadamente 100 000 camiones de carga y 8 800 vehículos de turismo que se desplazan cada año por la zona fronteriza entre Perú y Bolivia. El CEBAF actúa como sede de diferentes agencias estatales con competencia en frontera y que tiene entre sus objetivos asegurar y permitir llevar a cabo de manera efectiva y eficiente la función de control fronterizo por parte de los funcionarios de cada uno de los organismos nacionales de control en frontera”. 

Ante esta circunstancia, la cooperación policial y fiscal es más que necesaria. Como apunta el experto Joaquín López “el trabajo conjunto es esencial a fin de poder articular y desarrollar actuaciones investigadoras que, a la postre, resulten exitosas desde el prisma de la represión y sanción del delito de trata de personas y los fenómenos delictivos asociados al mismo”. 

Delitos como el de trata, subraya, López afectan principalmente a “personas susceptibles de ser victimizadas, tales como mujeres, niñas y niños en situación de pobreza, trabajadores migrantes, migrantes irregulares, refugiados, personas con discapacidad o población LGTBI+ cuyos derechos muchas veces ya están gravemente comprometidos, por lo que resulta prioritaria una intervención lo más temprana y precisa posible para atajar las situaciones de trata en que puedan verse inmersos”. 

Principales retos de la lucha contra el crimen organizado en Perú y Bolivia 

A través de la mirada de los expertos europeos de los proyectos bilaterales de Bolivia y Perú, hemos querido aproximarnos a los principales retos que enfrentan ambos países en lo relativo a la lucha contra el crimen organizado. Nos focalizamos principalmente en las dos temáticas que aborda el Programa EUROFRONT: la Gestión Integral de Fronteras y la lucha contra los delitos transfronterizos.

En palabras de Joaquín López, “la dispersión existente en las normas que regulan los distintos aspectos del fenómeno de la trata de seres humanos obstaculiza seriamente su trata¬miento eficaz”. Este armonización normativa es para el experto uno de los principales retos, junto con la necesidad de reducir la brecha de desigualdad entre Norte/Sur: “esto contribuiría sustancialmente a reducir el efecto expansivo de uno de los factores criminógenos de la trata como es la pobreza extrema, asociado a la cuestión de género y, de igual modo y en situación equiparable, la corrupción oficial cuyos altos niveles repercute de modo sustancial en el favorecimiento del delito y contribuye a mantener su impunida”. 

Para Gilles Sabatier, sería útil potenciar esta estructura existente del CEBAF para crear, a partir del modelo europeo, un Centro de Cooperación Policial y Aduanera (CCPA) integrando otras instituciones como las fuerzas policiales especializadas de Perú y Bolivia y los servicios de Migraciones: “la creación de este CCPA ayudaría a fortalecer la cooperación transfronteriza y la lucha contra el crimen organizado a través de una mejora de la cooperación operativa entre cuerpos de seguridad de ambos países”. 

Situados en lugares de importancia estratégica para observar la delincuencia transfronteriza, “los CCPA desempeñan en Europa un papel clave en la producción de inteligencia para los servicios operativos”, apunta el experto francés. Estos CCPA tienen tres misiones esenciales: (1) Información, recopilación e intercambio de información, (2) Asesoramiento y apoyo operativo, vigilancias transfronterizas, readmisión extranjeros, etc. y (3) Coordinación de las operaciones transfronterizas como los controles y patrullas conjuntas, catástrofe natural, mantenimiento del orden.

¿Cómo puede EUROFRONT materializar estos aprendizajes en recursos útiles para los países socios del Programa?

En palabras de Juan Manuel del Valle,  “a través de la formación que desarrollan programas como EUROFRONT es como se consigue tener una policía concienciada y especializada capaz de detectar los diferentes indicadores de delitos, así como ser experto en la detección de documentos falsos”. 

En este sentido, Sabatier destaca la intervención de Milagros Rivera Ramos, jefa de Migraciones para la región de Puno (Perú), durante la actividad realizada: “se ha mostrada muy interesada en la manera en la cual funciona los CCPA en el espacio SCHENGEN, manifestando que para Migraciones sería una herramienta que permitiría luchar de manera más eficaz contra la trata de seres humanos, habría previamente que establecer un marco jurídico que permita intercambiar informaciones entre las instituciones presentes en el CCPA”.

En definitiva, el testimonio de Rivera Ramos es un ejemplo entre muchos de cómo, a partir de actividades como la celebrada, los agentes en frontera se muestran interesados e implicados en intercambiar experiencias que puedan mejorar su coordinación. Como indica Del Valle, “en su mayoría todos los participantes se han mostrado muy interesados en la creación de los CCPA europeos, identificando las similitudes con el CEBAF en cierta manera y encontrando casos operativos de operaciones conjuntas similares que les pueden servir para avanzar y mejorar en la lucha”.